domingo, 12 de septiembre de 2010

ALBARRACÍN: TERUEL EXISTE





Una de las sorpresas más agradables del verano fue la posibilidad que se nos presentó, de manera espontánea y fortuíta, de conocer Teruel y alguno de sus lugares más emblemáticos: la sierra de Albarracín.


La ciudad de Teruel nos resultó acogedora y cercana y, sobre todo, accesible y fácil de recorrer andando, lo que permite desplazarse a través de sus estrechas calles, por un mundo que parece bien diseñado para hacerle fácil y cómoda la vida a sus habitantes.

Disfruté mucho descubriendo su fisonomía, los monumentos que constituyen la cima del arte mudéjar en nuestro país. Me emocionó especialmente encontrarme con la torre de San Martín, la que tantas veces había admirado en los libros de texto y contemplar los juegoss de luces y sombras sobre su fachada en un atardecer cargado de nubes amoratadas. Atravesar el viaducto que separa las dos partes de la ciudad permite admirar desde otra perspectiva una ciudad cuyo cielo parece apuntalado por las numerosas torres que desde iglesias y palacios se alzan.

Si la ciudad de Teruel nos había causado buena impresión, ni que decir tiene el impacto que nos produjo divisar a lo lejos la silueta de Albarracín, el contraste entre los tonos rojizos de sus edificaciones, a juego con la tierra y las rocas que la circundan, y el verde intenso de sus parques y jardines, de la abundante vegetación que llena de frescura los rincones de esta localidad, que bajo mi punto de vista, es una de las más bellas de nuestra geografía.

Recorrer sus calles empinadas y encontrar rincones, a cada cual más pintoresco, ha sido una de las experiencias más placenteras de este verano que está a punto de finalizar; porque a diferencia de otros pueblos que destacan por su interés paisajístico o monumental, Albarracín no está sobreexplotado turísticamente, no aparece atiborrado de tiendas de souvenir, ni tiene una excesiva oferta de establecimientos hoteleros, lo que permite explorarla y conocerla sin una excesiva masificación. No sé cómo se encontrará en el mes de agosto, pero en el mes de julio cuando estuvimos nosotros, daba gusto recorrer sus calles, entrar en bares y restaurantes sin la molesta sensación de tenerte que pelear con nadie por tomar una cerveza o por compartir una comida.


La siguiente parada la hicimos en el nacimiento del Tajo, y aquí sí tengo que decir que me sentí bastante decepcionada al ver aquel hilillo de agua que brotaba de debajo de unas piedras, después de haber contemplado numerosas cascadas y saltos de agua que aparecen en los lugares más insospechados a lo largo de la sierra.

Finalizamos el recorrido visitando el nacimiento del río Cuervo, ya en la provincia de Cuenca,lugar que yo ya conocía y que nunca deja de sorprenderte por su belleza.


De modo que sí, lo afirmo con conocimiento: TERUEL EXISTE y de qué manera...

25 comentarios:

doctorvitamorte dijo...

Me alegro muchísimo de que hayas disfrutado de este viaje tan completo entre arte y naturaleza. Me gusta que lo cuentes y cómo lo cuentas.Una escapadita para febrero, en torno a San Valentín, haría más completo tu gozo, para asistir a las Bodas de Isabel y Diego (los Amantes de Teruel)

Novicia Dalila dijo...

Bueno, bueno, cuando lo lea Luis Antonio se le saltan las lágrimas... :P
Yo no conozco la ciudad de Teruel, pero por como la describes, estoy segura de que es una gozada recorrerla. Lo tengo pendiente desde hace mucho, pero nunca encontramos ocasión.
El alto Tajo sin embargo lo conozco muy bien... De (más) jóvenes era nuestro destino habitual cuando salíamos de acampada libre... Maravillosos recuerdos tengo de aquellos tiempos y aquellos parajes.

Gracias por traérmelos al presente, Cristal.

Un beso muy fuerte y feliz semana

Doctor Krapp dijo...

Estoy in albis con respecto a ese territorio como Novicia pero lo subsanaré más temprano que tarde. Has hecho una hermosa descripción.

Luis Antonio dijo...

Novicia me conoce bien y aunque las lágrimas no asomen, el corazón sí acelera los pálpitos...

Me encantan las fotos que se hacen tras ramas de árboles, vegetación o flores...Igual que éstas.

Mi amor por las torres mudéjares está dividido, pero prefiero la de San Salvador.

Me habría gustado coincidir contigo por esos parajes, Cristal, pero los encuentros, para que se produzcan, requieren cierta planificación.

Comparto la recomendación de Vitamorte, pero sin olvidar las prendas de abrigo.

Cualquie dia montamos un encuentro por la ciudad de los Amantes en torno a un buen jamón D.O. Teruel y un vino del Somontano...Novicia tendrá que abrocharse bien el hábito...

Abrazos teruelanos, Cristal

Lola Mariné dijo...

Albarracin es precioso.
Hay muchos pueblos en España, fuera de las rutas turisticas que son una maravilla.
Me alegro que disfrutases conociendo esa zona.
Saludos.

MBI dijo...

Ya van dos personas este mes que me hablan de Teruel...bien,y yo sin ir...

cristal dijo...

No te quepa la menor duda, Vita, que me han quedado ganas de volver. He quedado gratamente impresionada con Teruel.

Un abrazo.

cristal dijo...

Tengo muy buen recuerdo de esos días que me supieron a poco. Me hubiera gustado estar más tiempo y haber podido conocerla mucho mejor.

Me alegra haberte traído buenos recuerdos, Novi.

Besitos.

cristal dijo...

Seguro que no te defrauda Krapp, merece la pena hacer un viaje al Bajo Aragón y dejarse sorprender por sus paisajes y sus gentes.

Besos y abrazos Dr.

cristal dijo...

Pues me alegra decirte que las fotos son mías, también a mí me gustan las ciudades y los pueblos a través de los árboles.

A mí también me hubiera gustado mucho que ese encuentro se hubiera producido pero ya te comenté que el viaje surgió sin planificación previa. Las circunstancias mutuas no lo hicieron posible.

En cuanto lo organices me avisas y que Novi y los doctores se preparen el uniforme.

Abrazos múltiples para ti.

cristal dijo...

Pero precioso de verdad, Lola.

Me sorprendió sobre todo su sobriedad y su falta de pretensiones, me encontré con una belleza pura, sin artificios.

Un abrazo fuerte.

cristal dijo...

Pues amímate MBI porque seguro que te va a gustar.

Saludos.

Jose Ramon Santana Vazquez dijo...

...traigo
sangre
de
la
tarde
herida
en
la
mano
y
una
vela
de
mi
corazón
para
invitarte
y
darte
este
alma
que
viene
para
compartir
contigo
tu
bello
blog
con
un
ramillete
de
oro
y
claveles
dentro...


desde mis
HORAS ROTAS
Y AULA DE PAZ


TE SIGO TU BLOG




CON saludos de la luna al
reflejarse en el mar de la
poesía...


AFECTUOSAMENTE
CRSITAL



ESPERO SEAN DE VUESTRO AGRADO EL POST POETIZADO DE CACHORRO, FANTASMA DE LA OPERA, BLADE RUUNER Y CHOCOLATE.

José
Ramón...

Antonio Martín Bardán dijo...

Sí, Cristal, Teruel existe, ¡y de qué manera! jaja.
Yo no tengo aún la dicha de conocerlo, a pesar de estar muy cerca de Madrid, pero un amigo estuvo hace poco y me lo recomendó.
Y, por cierto, que estuvo en el mes de agosto y me comentó que de masificación turística nada de nada.
Así que no me queda más que acercarme por allí en cuanto pueda.
Gracias por tu texto, tan bellamente descriptivo, y por tus buenas fotos.

Un abrazo turolense.

cristal00k dijo...

Bueno, bueno, bueno... pero que está pasando?
¿Todos en Teruel este verano? ¡ya ves!

Mi lugar es el Maestrazgo, un poco más al Este que tú. Un familiar político tiene la fortuna de poseer ahí una finca procedente de la Desamortización de Mendizábal, 200 hectáreas de bosque y bendita soledad y silencio total, en plena Sierra de Gúdar adonde acudo siempre que puedo, para desconectar absolutamente de todo. A destacar, que como estamos en plena Sierra sin luz electrica cercana, los cielos de verano y las fugaces son realmente impresionantes. En su día, todo un descubrimiento, que hoy considero un lujo. De Mora de Rubielos a Albarracín, sobran los lugares de profunda belleza en Teruel. Totalmente de acuerdo con lo que tan bien describes en tu entrada.

Tiene razón nuestro ilustre turolense, a ver si un año nos organizamos y conseguimos tomarnos un café todos juntos en amigable tertulia. Estaría genial no?

Un besazo Tocayita.

cristal dijo...

No puedo hacer otra cosa que demostrar mi admiración ante un comentario como el que me has dejado en esta entrada.

Bienvenido a este rincón. Me alegra que hayas llegado hasta aquí.

Nos leemos.

Cordiales y afectuosos saludos, Jose Ramón.

cristal dijo...

Pues yo que tú no dejaba de acercarme por allí cuando tuviese una oportunidad. Seguro que vas a disfrutar de toda la belleza que guardan estas tierras.

Me alegra que te haya gustado esta entrada.

Un abrazo fuerte, Antonio.

cristal dijo...

Pues yo que tú no dejaba de acercarme por allí cuando tuviese una oportunidad. Seguro que vas a disfrutar de toda la belleza que guardan estas tierras.

Me alegra que te haya gustado esta entrada.

Un abrazo fuerte, Antonio.

cristal dijo...

Parece que sí, que este verano la cita ha sido por tierras turolenses.

No conozco el Maestrazgo, pero después de lo que has contado, me han entrado muchas ganas de conocerlo también. Desde luego, tener el privilegio de poder disfrutar de 200 hectáreas de bosque, es todo un privilegio que a más de uno nos pone los dientes largos.

Desde luego que no estaría nada mal una cita en la ciudad de Teruel, o en Albarracín, y tomarnos ese café todos juntos.

Un abrazo fuerte y cariñoso Tocaya.

aguacateyfresas dijo...

Fantásticas estas fotografías, dan deseos de descubrir Teruel! saludos.

Miguel dijo...

Conozco Albarracín. He estado varias veces y cada vez me gusta más. Sí, Teruel existe.

Un saludo

cristal dijo...

Me alegra que te hayan gustado, Aguacateyfresas.

Merece la pena perderse por esas tierras.

Saludos.

cristal dijo...

Claro que existe y precisamente en estos días ha tenido un especial protagonismo en distintos medios decomunicación. Teruel en particular y sobre todo Aragón.

Un abrazo, Miguel.

MATISEL dijo...

Yo lo conocí hace unos años, y en cuánto pueda volveré...estoy de acuerdo contigo, vale la pena.

Un abrazo

Alfredo J Ramos dijo...

Suscribo lo que con tanto entusiasmo como exactitud describes, Cristal, tanto de Teruel como de Albarracín. De esta última, además (cosas de la memoria, que es caprichosa y se enreda en lo que quiere) recuerdo una de las mejores «migas pastoras» que he comido en mi vida. Abrazo.